Los pacientes con cánceres provocados por el asbesto podrían vivir más tiempo y con menos dolor gracias a una terapia innovadora que ralentiza el crecimiento de los tumores. En la actualidad, solo el siete por ciento de las personas con la enfermedad, llamada mesotelioma, sobreviven más de cinco años desde el diagnóstico.
Pero los resultados de un nuevo ensayo muestran que un nuevo fármaco, abemaciclib, puede prolongar la vida de las personas con la forma más agresiva de la enfermedad durante meses o incluso años.
El profesor Dean Fennell, quien dirigió el ensayo en la Universidad de Leicester, dijo: “El mesotelioma es una forma desagradable de cáncer y no ha habido un tratamiento efectivo”. Muchos pacientes se quedan sin opciones.
Los resultados de un nuevo ensayo muestran que un nuevo fármaco, abemaciclib, puede prolongar la vida de las personas con la forma más agresiva de la enfermedad durante meses o incluso años.
“Pero este nuevo tratamiento se ha mostrado prometedor al detener el progreso y, en algunos casos, revertir el crecimiento del cáncer en pacientes que no responden a la quimioterapia o los medicamentos de inmunoterapia. Esto puede añadir preciosos meses a sus vidas y permitirles vivir sin tanto dolor.’
Más de 2600 personas al año en el Reino Unido son diagnosticadas con mesotelioma. La mayoría tiene entre 60 y 80 años, y los hombres se ven más afectados que las mujeres porque generalmente es causado por el asbesto, el aislamiento que alguna vez se usó en pisos y techos. Los hombres que trabajaban en la industria de la construcción tenían más probabilidades de estar expuestos.
Si está intacto, el aislamiento de asbesto no causa daño. Pero si se rompe, se liberan fibras microscópicas en el aire. Estos entran en los pulmones donde causan cicatrices que se convierten en cáncer. Los tumores se encuentran en la membrana que rodea los pulmones, la pleura, el abdomen y los testículos, aunque no se sabe cómo se propaga.
El asbesto se retiró del uso en el Reino Unido en 1999, pero los casos de mesotelioma han aumentado en un 61 por ciento desde principios de la década de 1990. Puede tardar de 30 a 40 años en desarrollarse, lo que significa que los hombres que trabajaron con asbesto en la década de 1980 o principios de la de 1990 ahora corren mayor riesgo.
Debido a que el asbesto se usaba tan ampliamente en el Reino Unido, tenemos la peor tasa de mesotelioma del mundo, con 2.500 personas diagnosticadas al año.
El manager de Sex Pistols, Malcolm McLaren, murió de la enfermedad en 2010, a los 64 años.
Creía que estuvo expuesto al asbesto mientras renovaba Sex, la infame tienda en Kings Road, Londres, que dirigía con su antigua socia, la diseñadora Vivienne Westwood.
Una vez que la quimioterapia u otros tratamientos dejan de funcionar, el profesor Fennell dice que a los pacientes solo les quedan unos meses de vida. Pero los expertos creen que abemaciclib podría ofrecerles nuevas esperanzas. Funciona al permitir que el cuerpo produzca una proteína que combate el cáncer y, aunque no puede proporcionar una cura, puede detener la propagación del cáncer, lo que le otorga a los pacientes más tiempo.
Los pacientes del ensayo recibieron dos comprimidos al día durante 24 semanas. Después de seis meses de tratamiento, el 23 por ciento de ellos no había experimentado un crecimiento canceroso adicional, a pesar de que se esperaba que muchos murieran en este punto. Los pacientes sufrieron pocos efectos secundarios graves y también fueron menos dependientes de los analgésicos como resultado del tratamiento.
David Squires, de 65 años, de Huntingdon en Cambridgeshire, fue uno de los primeros pacientes de mesotelioma en el Reino Unido en beneficiarse. De adolescente, trabajó con asbesto, sin darse cuenta estaba inhalando diminutas fibras tóxicas que años después atacarían sus pulmones.
“Tenía solo 17 años cuando trabajé como aprendiz en una empresa local que instalaba puertas contra incendios”, dice David, padre de tres hijos. ‘Mi trabajo consistía en cortar y colocar el amianto en la parte trasera de las puertas de los hoteles.’
Siguió una larga carrera en la construcción, durante la cual David sospecha que entró en contacto con la sustancia peligrosa. Pero fue solo décadas después, cuando tenía poco más de 60 años, que la exposición pasó factura.
“Estaba jugando al golf en España cuando me quedé sin aliento”, dice.
Cuando la dificultad para respirar empeoró, David vio a su médico de cabecera, quien lo derivó para una radiografía de tórax. Mostró que tenía líquido en los pulmones que requería drenaje urgente. Pero lo peor estaba por venir. En noviembre de 2019, una biopsia confirmó que David tenía mesotelioma, con tres tumores en los pulmones.
Ingresó en un ensayo clínico en el Addenbrooke’s Hospital para dos medicamentos contra el cáncer, bevacizumab y atezolizumab, y durante un tiempo el cáncer se mantuvo a raya.
Pero el tumor volvió a crecer y cambiaron a David a abemaciclib. “He estado en eso durante más de un año y lo estaré durante otros ocho meses”, dice. ‘Mantiene mi cáncer bajo control y no he sufrido ninguna reacción al medicamento’. Ahora es optimista porque le dará más tiempo para hacer las cosas que le gustan: pasar tiempo con la familia y jugar al golf. “Conozco a otros con mesotelioma que duraron menos de seis meses después de ser diagnosticados”, dice David. “Juego al golf la mayoría de los días y mi hándicap es más bajo que antes de enfermarme. Me siento muy bien”.
Fuentes: www.espanol.news
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